El descarrilamiento del déficit en 2011: la culpa fue del chá, chá, chá

91.344 millones de euros, o lo que es lo mismo, un 8,51% del PIB. Este es el déficit del conjunto de administraciones públicas a cierre de 2011, según el avance de ejecución presupuestaria que presentó el ministro Montoro el pasado lunes 27. Después de reponernos de la sorpresa (del propio anuncio y de la cifra en cuestión), vamos a analizar los datos publicados por el Ministro.

Lo primero evidente es que la profecía de la ministra Salgado no se ha hecho real y España no ha cumplido con el objetivo de déficit para 2011. Tampoco la primera estimación oficial del nuevo Gobierno, que situó el déficit en el 8 / 8,2%, lo que suscitó algunas dudas desde Bruselas sobre la veracidad del dato y un posible “inflamiento” negado hasta la saciedad por el Ejecutivo de Rajoy. Al final la cifra en cuestión parece todavía peor si cabe, un 8,51%. El mayor peso sobre el déficit lo tiene la Administración Central con un 60% (de los 91.344 millones), seguido de las CCAA con un 35%, los entes locales con un 4% y la Seguridad Social con un 1%.

En prensa se han publicado numerosos artículos y en casi todos se destaca el incumplimiento de las CCAA. En el blog se ha escrito en numerosas ocasiones sobre la sostenibilidad económica de nuestro modelo autonómico (ver por ejemplo este post de Juan Luis Redondo o este otro de Alberto Gil). En este caso que nos ocupa del déficit autonómico incontrolado, hay que analizar varios aspectos. Para empezar, a diferencia de las Administraciones Central y Local, la Autonómica no ha mejorado su déficit en 2011, que se sitúa en un 2,94% del PIB, al igual que en 2010. Además de no mejorar, destaca el nivel de incumplimiento sobre el objetivo fijado para 2011, que recordemos que era del 1,3%. Solo Madrid ha cumplido con el objetivo y eso que sus cuentas han empeorado con respecto a 2010. Otras CCAA han mejorado su situación con respecto a 2010 pero no han podido cumplir con el objetivo (sería el caso de Navarra, La Rioja por ejemplo). La situación más preocupante la encontramos en aquellas Comunidades que empeoran en 2011 y además se alejan del objetivo del déficit, siendo Castilla La Mancha el caso más significativo.

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

 

¿Recuerdan que hace unos meses publicamos un post sobre los planes de las diferentes CCAA para atajar el déficit autonómico? Allí decíamos que ojo con el papel, que lo aguanta todo… y al final todas las CCAA (menos una) han incumplido el objetivo del déficit (y sobre el papel todas cumplían).

La Vicepresidenta del Gobierno ha aportado nuevos datos en su comparencia en el Senado un día después del anuncio del Sr Montoro. Para completar la foto, cifra la deuda de empresas, fundaciones y entes públicos en 60.000 millones de euros, es decir, un 5,6% del PIB. Cuidado porque la deuda de estos entes periféricos no se consolida en los presupuestos de las diferentes administraciones a las que pertenecen, por lo que los intereses y vencimiento de esa deuda “oculta” aflorará en los próximos ejercicios (este aspecto también lo abordamos en otro post).

El Ministro Luis de Guindos ha afirmado desde Nueva York que la desviación del déficit de 2011 (8,51% vs 6%) es “significativa” (lo que vienen siendo 2,51 puntos porcentuales) y pone de relieve que el año pasado no se hizo “lo que se tenía que hacer”. Podríamos profundizar en la responsabilidad del Gobierno de Zapatero, ya que la administración central es la primera que ha incumplido del objetivo del déficit y además no ha sido capaz de implantar mecanismos de control y corrección del desbocado déficit autonómico. Y también en la de los responsables autonómicos que no han sido capaces de sanear las cuentas de sus administraciones regionales. Pero como no hemos escuchado ninguna declaración relacionada con este espinoso tema de la “culpabilidad”, digamos como la canción de Gabinete Caligari, que la culpa fue del cha cha chá y miremos hacia delante para ver cómo se puede reconducir esta situación que algunos califican de emergencia nacional.

Pero el futuro pinta negro porque los datos se miren por donde se miren asustan. Al parecer el adelanto de la cifra del déficit por parte del Ministro Montoro pretendía ayudar a que Bruselas abra la puerta de una vez a la renegociación del objetivo para este año 2012. La respuesta de Bruselas no se ha hecho esperar: hasta que no se conozcan todos los ajustes de 2012 no se tomará una decisión al respecto.

Mientras tanto algunos responsables políticos han realizado diferentes declaraciones de diverso calado. Algunas de ellas significativas, como las del presidente de Cantabria: “Vamos desnudos. No hay un euro”. Otras polémicas, como las de los gobiernos andaluz y riojano, que discrepan de las cifras del déficit de sus correspondientes Comunidades presentadas por Montoro. Este baile de cifras no ayuda a que desde Bruselas no tengan dudas sobre la cifra del déficit publicado. Pero claro, parece más fácil discutir sobre las cifras que entonar el clásico y olvidado “mea culpa”. Se avecinan nuevos nubarrones en el horizonte.